miércoles, junio 29, 2011

Mexican Frenzy: ¡escapar ya!



Éramos 12 personas, así que estábamos todos. En la calle todo era caos. Había gente corriendo y gritando por todas partes, no había señales del valet y Laura me gritaba al oído: — ¿Qué hacemos? ¿Voy por las llaves? ¿Vamos a buscar el carro? — Mike dijo: — No, no, no. Ya olvídate de tu carro Laura, ya calaquió esa madre, yo digo que agarremos todas las llaves del valet y le piquemos a las alarmas y el primer carro que veamos, nos lo robamos. El Mireles intervino — Aparte, recomiendo que usemos una camioneta grande. Un zombie pasó corriendo por atrás de nosotros persiguiendo a una señora ya vieja, pero nadie reaccionó, sino que preferimos ir en busca de las llaves a la caseta del valet.

El Mireles, el Mike, el Dogo y yo agarramos llaves lo más rápido que pudimos y entre el caos de gente, comenzamos a presionar los botones de las alarmas, pero no teníamos suerte en encontrar algún carro. Se acercó un desconocido preguntando — ¿Puedo ir con ustedes?, el Gera le contestó: — Nel, no puedes, pero toma unas llaves del valet. El extraño presionó la alarma y el carro que reaccionó estaba justo enfrente de él, se subió antes de que alguien pudiera reaccionar y se fue. El Rudo dijo: —No mames goey. Todos miramos al Gera un momento con odio, pero continuamos buscando carros, ya nada podíamos hacer, además teníamos que apresurarnos, cada vez más gente se transformaba en zombie.

El Nacho, que había permanecido inmóvil, quizá por el shock de ver tanta sangre, tantos muertos vivientes corriendo y tanta gente gritando, se sentó lentamente en el suelo y encontró unas llaves justo a su lado, las tomó, presionó la alarma y una suburban nos respondió, justo cruzando la calle estaba estacionada. — ¡Devolada, vamonos! — gritó el Dogo. Corrimos al carro, cuando de repente un zombie que venía corriendo hacia nosotros tomó a la Neni de los hombros intentando morderla. El Mike jaló al zombie con todas sus fuerzas y logró tumbarlo, pero en el suelo, el zombie agarró al Mike del pie, intentó morderlo y le arrancó un pedazo de su tenis. El dogo, el Rudo y yo, lo pateamos con fuerza varias veces hasta que soltó al Mike, y justo cuando corríamos para subir al carro, el zombie alcanzó a rasguñar al Rudo en la pierna.

5 comentarios:

Mike Muciño dijo...

Recuerdo perfectamente ese momento, pinche Rudo rifador.

neniza dijo...

me salvasteee <3

a* dijo...

Ya me piqué jajajaja :D

a* dijo...

Ya me piqué jajajaja :D

Smireles dijo...

ajajajajaj laa nenii!!!