Rojo dolor, refleja el metal
latido pulsante y lento respiro
el fuego universal, purificador elemental
Música fatua, ojos ardientes
sonata perfecta, memoria pendiente
reflejo sombrío y sangre en los dientes
La respiración se escucha con
ecos dentro del casco oxigenado, todo lo ve a través de un cristal azulado de
realidad aumentada. Cada detalle en el espacio se percibe con capacidad
sobrehumana, Kara se siente un cylon. Su visión y su existencia misma están
limitadas a su traje. Piensa en la fragilidad del hombre, capaz de todo y de
nada. Tan solo un soplido de fuego, una falla en el aire, la ausencia de agua,
lo condenaban.
¿En realidad necesito eso? Una
punzada en su pecho, es la sensación de reja
vu. Recuerda que recuerda algo, pero el recuerdo no aparece, todo está
dispuesto a repetirse en un ciclo. ¿Cuántas cosas ocultas yacen en la más
profunda obscuridad de los recuerdos perdidos? ¿De qué depende la existencia y
dónde está la línea delgada que nos divide? Si tan sólo Dios lo supiera, el
Dios único.
Kara respira profundamente. Sus
entrañas le hablan. Se comunican con vacío y dolor. El olor a cigarro está
arraigado en su cabello. Exhala y puede olfatear su aliento, ese olor propio, definido
tan sólo por ella misma, con clara textura, sabor y color. Sus entrañas le
estrujan fuertemente por dentro, siente la necesidad de un abrazo, una lágrima
resbala por su mejilla y salta… dejando el aroma de su aliento en el cielo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario